Rugir y gatear


Soy  VicKo un león  que tuvo la dicha de encontrar en su camino a Jackie, una hermosa leona (eso lo dice el zodiaco)  con quien aparte de nuestro signo  y mes de nacimiento y  entre muchas cosas más, comparto una fascinación por estos hermosos mamíferos.

Siempre tan distintos pero tan complementarios, primero como amigos y luego ya como novios  gozamos de una relación plena y llena de amor, por ello  decidimos formar nuestra propia “manada” y  planear una boda que fuera recordada por mucho tiempo en la jungla,  pero sin esperarlo  ciertas situaciones negativas nos hicieron presa del estrés y la presión;  y con ello nuestros sueños, ilusiones y planes se vieron un poco empañados.

Fue entonces cuando de forma por demás inesperada nuestras vidas tomaron un nuevo rumbo: después de ciertas sospechas e incluso miedos de que Jack pudiese estar enferma  por tanto estrés y emociones negativas fuimos llenos de inquietud a salir de dudas con una médico de la selva; explicamos sus malestares y le aclaramos que parte de nuestra preocupación era porque nos cuidábamos para no tener «leoncitos» por el momento, y nos inquietaba que descartando lo anterior pudieran ser complicaciones de salud, nos preguntó si siempre lo habíamos hecho así, y tuvimos que confesar que en una ocasión (sí, una sola) no resistimos y dejamos de lado nuestras precauciones.

Ahora mismo me vienen muchos recuerdos pero los resumiré en la siguiente
frase:
“¡Pues que puntería ‘mijo’, le atinaste…  van a ser papás, muchas felicidades!”

“J” y yo nos abrazamos acompañados de una sensación de bienestar  y  calma momentánea, enseguida  vino  la alegría por saber que se trataba de la bendición de ser papás; después de las indicaciones de la ginecóloga salimos y  ya con lágrimas en los ojos nos besamos y reímos.

Recuerdo también como los planes cambiaron de inmediato, nuestra boda increíblemente pasó a segundo término y todo lo negativo tuvo cada vez menos relevancia, comenzaron nuevos planes (¡y cómo no!),  la emoción nos
invadió  y junto a ella el nerviosismo y por qué no decirlo, también ciertos miedos.

Como leones supimos que algunas cosas iban a tener que esperar, pero en su lugar vendrían otras para las cuales nos teníamos que comenzar a preparar a la de ya,  no era secreto que algunos de esos momentos que comenzaríamos a compartir quizá nos harían “desmelenarnos” pero nuestro amor y esa gran ilusión nos hizo pensar también en que  hasta nosotros llegaba la mejor oportunidad de aprender  un universo de nuevas cosas. Desde entonces la vida tiene un nuevo sentido, el aire de la jungla se respira distinto, nuestros  corazones palpitan a otro ritmo y nuestros pasos desde ese preciso momento comenzaron  a tener una nueva cadencia, el palpitar del  corazón de nuestro primer cachorro…“E”
Por ello teníamos que permanecer en constante evolución, para reaprender a RUGIR y caminar, y para esto último era indudable que teníamos que  comenzar por recuperar la destreza de  GATEAR con la felicidad de cuando nosotros éramos cachorros.

SALUDOS!

“V”


Sigue leyendo ->

Rugir y gatear


Soy  VicKo un león  que tuvo la dicha de encontrar en su camino a Jackie, una hermosa leona (eso lo dice el zodiaco)  con quien aparte de nuestro signo  y mes de nacimiento y  entre muchas cosas más, comparto una fascinación por estos hermosos mamíferos.

Siempre tan distintos pero tan complementarios, primero como amigos y luego ya como novios  gozamos de una relación plena y llena de amor, por ello  decidimos formar nuestra propia “manada” y  planear una boda que fuera recordada por mucho tiempo en la jungla,  pero sin esperarlo  ciertas situaciones negativas nos hicieron presa del estrés y la presión;  y con ello nuestros sueños, ilusiones y planes se vieron un poco empañados.

Fue entonces cuando de forma por demás inesperada nuestras vidas tomaron un nuevo rumbo: después de ciertas sospechas e incluso miedos de que Jack pudiese estar enferma  por tanto estrés y emociones negativas fuimos llenos de inquietud a salir de dudas con una médico de la selva; explicamos sus malestares y le aclaramos que parte de nuestra preocupación era porque nos cuidábamos para no tener «leoncitos» por el momento, y nos inquietaba que descartando lo anterior pudieran ser complicaciones de salud, nos preguntó si siempre lo habíamos hecho así, y tuvimos que confesar que en una ocasión (sí, una sola) no resistimos y dejamos de lado nuestras precauciones.

Ahora mismo me vienen muchos recuerdos pero los resumiré en la siguiente
frase:
“¡Pues que puntería ‘mijo’, le atinaste…  van a ser papás, muchas felicidades!”

“J” y yo nos abrazamos acompañados de una sensación de bienestar  y  calma momentánea, enseguida  vino  la alegría por saber que se trataba de la bendición de ser papás; después de las indicaciones de la ginecóloga salimos y  ya con lágrimas en los ojos nos besamos y reímos.

Recuerdo también como los planes cambiaron de inmediato, nuestra boda increíblemente pasó a segundo término y todo lo negativo tuvo cada vez menos relevancia, comenzaron nuevos planes (¡y cómo no!),  la emoción nos
invadió  y junto a ella el nerviosismo y por qué no decirlo, también ciertos miedos.

Como leones supimos que algunas cosas iban a tener que esperar, pero en su lugar vendrían otras para las cuales nos teníamos que comenzar a preparar a la de ya,  no era secreto que algunos de esos momentos que comenzaríamos a compartir quizá nos harían “desmelenarnos” pero nuestro amor y esa gran ilusión nos hizo pensar también en que  hasta nosotros llegaba la mejor oportunidad de aprender  un universo de nuevas cosas. Desde entonces la vida tiene un nuevo sentido, el aire de la jungla se respira distinto, nuestros  corazones palpitan a otro ritmo y nuestros pasos desde ese preciso momento comenzaron  a tener una nueva cadencia, el palpitar del  corazón de nuestro primer cachorro…“E”
Por ello teníamos que permanecer en constante evolución, para reaprender a RUGIR y caminar, y para esto último era indudable que teníamos que  comenzar por recuperar la destreza de  GATEAR con la felicidad de cuando nosotros éramos cachorros.

SALUDOS!

“V”


Sigue leyendo ->

PANERO

Por azares de la vida opositora acabé viviendo en Las Palmas compensado por un exiguo plus de desarraigo y las bondades climatológicas de Gran Canaria.No me esperaba mucho de mi estancia, ni esperaba vivir gran tiempo allí aunque cuatro años de mi vida…

Sigue leyendo ->

Las guerras y su efecto en los pequeños

Cualquier padre lo entenderá, pero yo cada vez que veo países guerra en las noticias pienso en el miedo que deben de estar pasando todos los padres que viven allí. Y es que el peor miedo no es lo que te pueda pasar; lo peor es lo que les puede pasar a tus hijos.

Me vais a permitir que, con motivo del vídeo que acaba de publicar la organización sin ánimo de lucro Save the Children, cambie hoy un poco el tono de mi artículo.

El instinto protector natural

Cada día velamos por que nuestros pequeños vivan felices y casi les fabricamos una burbuja protectora en la que no permitimos entrar penas ni desesperaciones.

Es instintivo. Es natural. Sabemos que tarde o temprano la vida busca el equilibrio y le irá mostrando como otra parte de la vida. Y si las cosas ocurren en su justa medida y a su tiempo, solemos saber reaccionar y ayudarles a superar esas dificultades.

De repente algo cambia

Sin embargo, en ocasiones, las estrategias políticas, las luchas de poder (frecuentemente basadas en disculpas religioso-ideológicas) o simplemente la avaricia económica de algunos, hace que nuestro mundo se rompa en mil pedazos.

No nos engañemos, las guerras son provocadas , pues poca (o ninguna diferencia) hay entre hacer que algo ocurra o evitarlo cuando se puede.

El miedo de los padres

Los padres somos así. Estoy seguro de que todos los padres y madres estarán de acuerdo conmigo en que el peor miedo no es lo que me pueda pasar a mi. En realidad, lo que nos aterroriza es lo que les podrá pasar a nuestros pequeños.

No es un acto de heroísmo. Es lo natural. Es instintivo. Los queremos y nos preocupa más lo que les pueda pasar a ellos que nuestra propia integridad. Algunos lo llamarán instinto de perpetuación de la especie. Yo lo llamo amor de padre.

Save the Children y la vida de los niños en una guerra.

Save the Children acaba de lanzar un video para mostrar como los conflictos de los mayores destrozan la vida de los más pequeños.

En el vídeo se muestra un segundo diario de la vida de una niña durante un año. Empieza en su cumpleaños y termina en el siguiente cumpleaños.

Durante ese año estalla la guerra y se ve como una niña normal pasa a ser una víctima de la guerra de los mayores y su vida cambia radicalmente a peor.

Save the Children trata de concienciar a la gente de que los conflictos tienen estas consecuencias y, «aunque ahora mismo no esté pasando aquí mismo no significa que no esté pasando en muchos sitios en este mismo momento». En concreto tratan de llamar la atención sobre lo que está pasando con la población Siria (que cumple ya tres años de conflicto), pero podría aplicarse a cualquier situación bélica.

El vídeo no tiene desperdicio

Sigue leyendo ->

Las guerras y su efecto en los pequeños

Cualquier padre lo entenderá, pero yo cada vez que veo países guerra en las noticias pienso en el miedo que deben de estar pasando todos los padres que viven allí. Y es que el peor miedo no es lo que te pueda pasar; lo peor es lo que les puede pasar a tus hijos.

Me vais a permitir que, con motivo del vídeo que acaba de publicar la organización sin ánimo de lucro Save the Children, cambie hoy un poco el tono de mi artículo.

El instinto protector natural

Cada día velamos por que nuestros pequeños vivan felices y casi les fabricamos una burbuja protectora en la que no permitimos entrar penas ni desesperaciones.

Es instintivo. Es natural. Sabemos que tarde o temprano la vida busca el equilibrio y le irá mostrando como otra parte de la vida. Y si las cosas ocurren en su justa medida y a su tiempo, solemos saber reaccionar y ayudarles a superar esas dificultades.

De repente algo cambia

Sin embargo, en ocasiones, las estrategias políticas, las luchas de poder (frecuentemente basadas en disculpas religioso-ideológicas) o simplemente la avaricia económica de algunos, hace que nuestro mundo se rompa en mil pedazos.

No nos engañemos, las guerras son provocadas , pues poca (o ninguna diferencia) hay entre hacer que algo ocurra o evitarlo cuando se puede.

El miedo de los padres

Los padres somos así. Estoy seguro de que todos los padres y madres estarán de acuerdo conmigo en que el peor miedo no es lo que me pueda pasar a mi. En realidad, lo que nos aterroriza es lo que les podrá pasar a nuestros pequeños.

No es un acto de heroísmo. Es lo natural. Es instintivo. Los queremos y nos preocupa más lo que les pueda pasar a ellos que nuestra propia integridad. Algunos lo llamarán instinto de perpetuación de la especie. Yo lo llamo amor de padre.

Save the Children y la vida de los niños en una guerra.

Save the Children acaba de lanzar un video para mostrar como los conflictos de los mayores destrozan la vida de los más pequeños.

En el vídeo se muestra un segundo diario de la vida de una niña durante un año. Empieza en su cumpleaños y termina en el siguiente cumpleaños.

Durante ese año estalla la guerra y se ve como una niña normal pasa a ser una víctima de la guerra de los mayores y su vida cambia radicalmente a peor.

Save the Children trata de concienciar a la gente de que los conflictos tienen estas consecuencias y, «aunque ahora mismo no esté pasando aquí mismo no significa que no esté pasando en muchos sitios en este mismo momento». En concreto tratan de llamar la atención sobre lo que está pasando con la población Siria (que cumple ya tres años de conflicto), pero podría aplicarse a cualquier situación bélica.

El vídeo no tiene desperdicio

Sigue leyendo ->

Papi de rosa

Yo, que no soy de fijarse en detalles, cuando entré en una tienda y vi el carrito en cuestión pensé que esas cuatro ruedas acabarían siendo movidas por mis manos.

Pocos días después llegó mi sufridora, la que es capaz de aguantarme día tras día hablando de un tal Bugaboo, y yo, ese que no se fija en el más nimio detalle, recordé que esa combinación fonética no era la primera vez que llegaba

Sigue leyendo ->

Papi de rosa

Yo, que no soy de fijarse en detalles, cuando entré en una tienda y vi el carrito en cuestión pensé que esas cuatro ruedas acabarían siendo movidas por mis manos.

Pocos días después llegó mi sufridora, la que es capaz de aguantarme día tras día hablando de un tal Bugaboo, y yo, ese que no se fija en el más nimio detalle, recordé que esa combinación fonética no era la primera vez que llegaba

Sigue leyendo ->

Turismo politizado

No sé si el título es el que mejor define estas líneas, pero es verdad que ya hace tiempo  tenía ganas de hacer esta reflexión, que por otra parte seguro muchos habrán podido comprobar.
La división administrativa a la que nos vemos sometidos por voluntad popular, hace que en muchos casos los servicios lleguen con calidad y eficacia a los lugares más distantes de los centros administrativos, pero por otra parte provoca una división en estamentos dominados por una u otra formación política que hace al final perdamos algunos de los objetivos primordiales para los que fueron creados.
Todo esto para introducir como afecta esta división administrativa acompañada de la consiguiente división política a un tema tan de actualidad como el turismo que parece nos ha sacado las castañas del fuego en esta ya dilatada crisis.
El turista y el viajero(a este último apenas lo cuidamos), cuando llega a un emplazamiento concreto sufre muchas veces esa fuerte división que hace le oferten en muchos casos infinidad de folletos concretísimos de zonas que en muchas ocasiones distan apenas algunos kilómetros pero que gestionan entidades diferentes e incluso muchas veces enfrentadas políticamente según el color que las gobierna. Esto no produce más que desconcierto y desinformación para ese visitante que se ha desplazado a un lugar concreto y quiere conocerlo sin importarle esas fronteras administrativas.
Algo parecido ocurre en las ferias donde se promocionan sin ningún tipo de coordinación Comunidades, Diputaciones, Ayuntamientos, Comarcas y asociaciones de todo tipo con mensajes en muchos casos similares que crean una sensación de caos en el usuario obligado a recorrer un sinfín de lugares para obtener la información que busca. Todo ello sin hablar del coste que nos supone a todos el mantener ese sistema.

En mi humilde opinión no podemos permitirnos tales despropósitos y debemos mostrar una imagen y una realidad mucho más unificada y coordinada.
Por supuesto no todo está tan mal y se están haciendo muchas cosas bien principalmente en los últimos tiempos. En muchos casos son las propias empresas las que se ponen de acuerdo con la competencia para sacar proyectos interesantes que no entienden de límites administrativos. Pero aún queda muchísimo por hacer desde la administración para coordinar actividades que no se solapen y de este modo promocionar de manera organizada y conjunta, superando esos límites locales.
Y vosotros ¿como lo veis?

Sigue leyendo ->

Turismo politizado

No sé si el título es el que mejor define estas líneas, pero es verdad que ya hace tiempo  tenía ganas de hacer esta reflexión, que por otra parte seguro muchos habrán podido comprobar.
La división administrativa a la que nos vemos sometidos por voluntad popular, hace que en muchos casos los servicios lleguen con calidad y eficacia a los lugares más distantes de los centros administrativos, pero por otra parte provoca una división en estamentos dominados por una u otra formación política que hace al final perdamos algunos de los objetivos primordiales para los que fueron creados.
Todo esto para introducir como afecta esta división administrativa acompañada de la consiguiente división política a un tema tan de actualidad como el turismo que parece nos ha sacado las castañas del fuego en esta ya dilatada crisis.
El turista y el viajero(a este último apenas lo cuidamos), cuando llega a un emplazamiento concreto sufre muchas veces esa fuerte división que hace le oferten en muchos casos infinidad de folletos concretísimos de zonas que en muchas ocasiones distan apenas algunos kilómetros pero que gestionan entidades diferentes e incluso muchas veces enfrentadas políticamente según el color que las gobierna. Esto no produce más que desconcierto y desinformación para ese visitante que se ha desplazado a un lugar concreto y quiere conocerlo sin importarle esas fronteras administrativas.
Algo parecido ocurre en las ferias donde se promocionan sin ningún tipo de coordinación Comunidades, Diputaciones, Ayuntamientos, Comarcas y asociaciones de todo tipo con mensajes en muchos casos similares que crean una sensación de caos en el usuario obligado a recorrer un sinfín de lugares para obtener la información que busca. Todo ello sin hablar del coste que nos supone a todos el mantener ese sistema.

En mi humilde opinión no podemos permitirnos tales despropósitos y debemos mostrar una imagen y una realidad mucho más unificada y coordinada.
Por supuesto no todo está tan mal y se están haciendo muchas cosas bien principalmente en los últimos tiempos. En muchos casos son las propias empresas las que se ponen de acuerdo con la competencia para sacar proyectos interesantes que no entienden de límites administrativos. Pero aún queda muchísimo por hacer desde la administración para coordinar actividades que no se solapen y de este modo promocionar de manera organizada y conjunta, superando esos límites locales.
Y vosotros ¿como lo veis?

Sigue leyendo ->

El Arte de lo Posible

 

Siempre he sentido que la docencia es un don con el que se nace, que por supuesto se va puliendo y enriqueciendo con la experiencia, pero que sin duda tiene un fuerte componente innato. Me gusta llamarlo, porque así lo vivo y lo experimento, el Arte de lo Posible. Arte porque brota de dentro y no puede refrenarse, porque en su expresión más refinada y cuidadosa está reservado a artistas, a artesanos/as que necesitan entregarse en cuerpo y alma a una labor tan pertinaz y precisa como es tratar de inspirar a personas, de influirles positivamente hasta que sean capaces de descubrir y aportar al mundo lo mejor (y mucho) que llevan dentro. De lo Posible (en mayúsculas) porque estos/as artistas siempre ven posibilidades donde otros ven defectos, escudriñan tesoros donde otros ven ruínas, porque no dan nada por perdido, todo lo contrario, siempre tienen un recurso, una nueva pincelada, para llegar al corazón de las personas y que éstas no se sientan solas, abandonadas en la cuneta (a veces académica, a veces de autoestima).

 
Artistas de lo Posible que hacen lo imposible por motivar, por tender su mano, por orientar, por facilitar, por impulsar, por alegrar y sobre todo por apoyar sin condiciones a las personas que más lo necesitan y a las que sólo con el hecho de arrancarles una sonrisa o que hagan suya alguna de sus enseñanzas ya se les ilumina la cara y tienen genio suficiente para seguir adelante.
 
Artistas de lo Posible como María, la protagonista de este precioso vídeo y que me ha llegado al corazón, como docente y como persona. No os lo perdáis.
 
 
Sigue leyendo ->

El Arte de lo Posible

 

Siempre he sentido que la docencia es un don con el que se nace, que por supuesto se va puliendo y enriqueciendo con la experiencia, pero que sin duda tiene un fuerte componente innato. Me gusta llamarlo, porque así lo vivo y lo experimento, el Arte de lo Posible. Arte porque brota de dentro y no puede refrenarse, porque en su expresión más refinada y cuidadosa está reservado a artistas, a artesanos/as que necesitan entregarse en cuerpo y alma a una labor tan pertinaz y precisa como es tratar de inspirar a personas, de influirles positivamente hasta que sean capaces de descubrir y aportar al mundo lo mejor (y mucho) que llevan dentro. De lo Posible (en mayúsculas) porque estos/as artistas siempre ven posibilidades donde otros ven defectos, escudriñan tesoros donde otros ven ruínas, porque no dan nada por perdido, todo lo contrario, siempre tienen un recurso, una nueva pincelada, para llegar al corazón de las personas y que éstas no se sientan solas, abandonadas en la cuneta (a veces académica, a veces de autoestima).

 
Artistas de lo Posible que hacen lo imposible por motivar, por tender su mano, por orientar, por facilitar, por impulsar, por alegrar y sobre todo por apoyar sin condiciones a las personas que más lo necesitan y a las que sólo con el hecho de arrancarles una sonrisa o que hagan suya alguna de sus enseñanzas ya se les ilumina la cara y tienen genio suficiente para seguir adelante.
 
Artistas de lo Posible como María, la protagonista de este precioso vídeo y que me ha llegado al corazón, como docente y como persona. No os lo perdáis.
 
 
Sigue leyendo ->

Revisión del estado y contenido de la lobocueva. Yes this blog is still alive, manquenoloparezca



Voy a dejar de mirar cuando fue la última vez que pasé por aquí porque ya tengo bastantes motivos para agobiarme y no necesito ninguno más. Es más, el gobierno ya se encarga de ello.

Así que parafraseando a alguien más sabio que yo y aprovechando que polvo es y en polvo se convirtió empezaré con un socorrido: Como decíamos ayer.

Dejamos este blog con una amenaza en ciernes sobre el reinado de las tierras del norte por parte de los rubios. Pues esa amenaza, como muchos twitteros saben, se ha consumado en la forma de «el moreno», que no Jose Luís queconste, y que se ha tomado esto de vivir en el mundo exterior con una calma similar a la que trajo el pequeñoM y así lleva un mes completo y pasado en un sin vivir entre una teta, los brazos del primero que pase cerca, más teta, más siesta y así en un ciclo sin fin, todo un suplicio oiga.

Y para suplicio el del rubio menor o pequeñoJ que se ha tomado eso de pasar de ser el pequeño a ser el mediano de la misma forma que media docena de chupitos de aceite de ricino. Amos, que no es que le haya sentado mal, es que ni una patada en los cojones hubiera salido peor. Y así le tenemos desde hace un més con una afásia galopante, tartamudo perdido para los futuros discípulos de Wert y teniendo en cuenta que comienza a hacer sus pinitos en el maravilloso mundo de pregúntale por qué a papá pues hay
tardes que parece que me está interrogando Arévalo.


No crean que se ha quedado ahí la cosa y el peque ha interiorizado toda esta nueva situación y punto, que va. Desde hace un més ha desplegado todos los sistemas bélicos y cada vez que su primo anda cerca se coloca al lado de su madre cual miembro del Regimiento de Cosacos Reales de Buckinghan y no se separa de ella así caigan chuzos de punta. Que una cosa es que no pase nada porque su madre tenga en brazos al moreno, pero desde luego a casa no se trae.

Y que conste que tiene las ideas muy claras sobre este tema y así cuando se le pregunta qué le parece a él que nos traigamos a uno igual pero en rubio a casa, el contesta con un NO que normalmente suena a «por mis cojones».

¿Y qué pasa con el mayor? ¿Con el que estaba el primero? Pues podemos decir que poco a poco se está dando cuenta de que eso de la edad tiene sus ventajas y que por muchos primos que lleguen, el va a seguir siendo el mayor, el que les va a enseñar de todo, a comer, a caminar, a correr, a jugar a la tablet (bueno, eso habría que matizarlo pero ya se verá), así que mientras no adoptemos a un primo o hermano de 18 años, él está más contento que unas castañuelas con su nuevo primo.

Fin de la operación pañal II parte


Pues podemos dar por finalizada la segunda fase de maniobras de la operación pañal, desde hace una semana el pequeñoJ no usa pañal para nada, ni de día, ni de noche. Sigue habiendo algún que otro escape, pero son producidos por la falta de experiencia a la hora de controlar el tercer estadío Zen en el que entra el peque de vez en cuando y que hace que se olvide de todo aquello que tiene a su alrededor.
Y podemos respirar tranquilos, porque la técnica de «vamos a regar el árbol» funciona a la perfección y no tenemos que salir pitando a buscar un servicio cada vez que suena el «me hago piiiiiiiiiis». 

Como contrapartida hemos desarrollado la técnica de dar por saco con el pis, hasta límites de maestro Shaolin . Y así nos hacemos pis a los 5 minutos de entrar en el coche, cuando el carro de la compra está casi lleno, cuando vas con el tiempo justo, a las cuatro de la madrugada y todo eso.

Un broncas que se ríe a carcajada limpia

Así es el pequeñoJ, el prototipo de hermano menor, picajoso hasta más no poder, liante como el que más, movido como si le hubieran metido un supositorio de capsicina, capaz de descojonarse hasta de su propia sombra y siempre dispuesto para la juerga. Con todo estas cualidades sigue teniendo todas las papeletas para ser un verdadero dolor de cabeza en el futuro.

No obstante, sigue conservando esa capacidad de hacerte bajar a los infiernos para un par de segundos más tarde devolverte al paraíso con un simple cambio en su mirada, mimoso como un gato persa, sabe muy bien qué funciona y qué no con cada uno de nosotros. 

Y a pesar de lo mucho que hace rabiar a su hermano, tengo muy claro que es con diferencia a quien más quiere de todos lo que le rodean, es su modelo y su igual, su compañero de juegos, su capitán, su montura. Todo lo que haga su hermano está bien hecho y punto, (salvo que toque picarle claro, ahí la cosa cambia) Si su hermano pide hamburguesa para cenar, el quiere hamburguesa, si a su hermano no le gusta el postre a él tampoco (el hecho de que lleve devorado medio plato no es impedimento para que de repente nos deje de gustar) y más vale que no riñas a su hermano delante de él, porque vas a desatar al pitbull.

pequeñoM la sensibilidad hecha un rizo


Siempre ha sido un niño de los mal llamados «de lágrima fácil», pero a medida que vamos creciendo esto se va acentuando, hasta el punto en que este último mes parezca que tenga a la Magdalena en casa. Si le riñes, llora, si algo no le sale, llora, si su hermano le toca, llora, si le dices cómo debe hacer las cosas, llora, si le dices que no, llora y yo ya no se como gestionar eso. Me desespera, sobre todo cuando empieza con eso de «mira lo que has hecho. Me has hecho llorar».

Y si a todo lo anterior, le añadimos su archifamosa nacionalidad sueca, podemos decir que nos pasamos el día viajando entre valles de lágrimas y los mundos de yupi y 15 galaxias más allá.

Pero la misma sensibilidad que le hace llorar a la mínima, también le hace fijarse en todo lo que le rodea y querer ir mucho más allá, saber cómo funciona todo, que hay detrás de las cosas, cómo funciona nuestro cuerpo (que es en lo que andamos ultimamente y ya se conoce la serie de erase una vez el cuerpo humano de memoria). Cualquier conversación que se realice cerca de él queda grabada automáticamente para poder ser examinada en un mejor momento. Y así te puede sorprender tres semanas más tarde con una pregunta acerca de algo que dijiste ayer. Teniendo en cuenta que para él conceptos como «ayer» y «esta mañana» siguen siendo las únicas medidas de tiempo universales y sirven para expresar pasado, presente y futuro en cualquier dimensión (ayer abarca desde -24h hasta varios meses). A veces creo que estoy viviendo con el guionista de Fringe. 
Y ya cuando tiene claro que hay algo que pasó hace mucho tiempo usa la medida de «cuando era de dos años».

Un ejemplo claro sería: 
– «¿A que cuando era de dos años había dinosaurios que comían hierba y otros que se comían a los dinosaurios más pequeños?» 
– Si hijo, si. Y cuando eras de uno surgió el Big Bang.

En definitiva podemos decir que seguimos adaptándonos, que hay días mejores y otros que no lo son tanto. Por mi parte diré que sigue siendo muy complicado controlar los gritos y calmarme, a veces se consigue y otras no tanto. Y cuanto más me cabreo más me ofusco conmigo mismo por no ser capaz de salir de ese círculo, de no poder ver las cosas desde otra perspectiva.

Seguimos aprendiendo

Sígueme
Sigue leyendo ->

Revisión del estado y contenido de la lobocueva. Yes this blog is still alive, manquenoloparezca



Voy a dejar de mirar cuando fue la última vez que pasé por aquí porque ya tengo bastantes motivos para agobiarme y no necesito ninguno más. Es más, el gobierno ya se encarga de ello.

Así que parafraseando a alguien más sabio que yo y aprovechando que polvo es y en polvo se convirtió empezaré con un socorrido: Como decíamos ayer.

Dejamos este blog con una amenaza en ciernes sobre el reinado de las tierras del norte por parte de los rubios. Pues esa amenaza, como muchos twitteros saben, se ha consumado en la forma de «el moreno», que no Jose Luís queconste, y que se ha tomado esto de vivir en el mundo exterior con una calma similar a la que trajo el pequeñoM y así lleva un mes completo y pasado en un sin vivir entre una teta, los brazos del primero que pase cerca, más teta, más siesta y así en un ciclo sin fin, todo un suplicio oiga.

Y para suplicio el del rubio menor o pequeñoJ que se ha tomado eso de pasar de ser el pequeño a ser el mediano de la misma forma que media docena de chupitos de aceite de ricino. Amos, que no es que le haya sentado mal, es que ni una patada en los cojones hubiera salido peor. Y así le tenemos desde hace un més con una afásia galopante, tartamudo perdido para los futuros discípulos de Wert y teniendo en cuenta que comienza a hacer sus pinitos en el maravilloso mundo de pregúntale por qué a papá pues hay
tardes que parece que me está interrogando Arévalo.


No crean que se ha quedado ahí la cosa y el peque ha interiorizado toda esta nueva situación y punto, que va. Desde hace un més ha desplegado todos los sistemas bélicos y cada vez que su primo anda cerca se coloca al lado de su madre cual miembro del Regimiento de Cosacos Reales de Buckinghan y no se separa de ella así caigan chuzos de punta. Que una cosa es que no pase nada porque su madre tenga en brazos al moreno, pero desde luego a casa no se trae.

Y que conste que tiene las ideas muy claras sobre este tema y así cuando se le pregunta qué le parece a él que nos traigamos a uno igual pero en rubio a casa, el contesta con un NO que normalmente suena a «por mis cojones».

¿Y qué pasa con el mayor? ¿Con el que estaba el primero? Pues podemos decir que poco a poco se está dando cuenta de que eso de la edad tiene sus ventajas y que por muchos primos que lleguen, el va a seguir siendo el mayor, el que les va a enseñar de todo, a comer, a caminar, a correr, a jugar a la tablet (bueno, eso habría que matizarlo pero ya se verá), así que mientras no adoptemos a un primo o hermano de 18 años, él está más contento que unas castañuelas con su nuevo primo.

Fin de la operación pañal II parte


Pues podemos dar por finalizada la segunda fase de maniobras de la operación pañal, desde hace una semana el pequeñoJ no usa pañal para nada, ni de día, ni de noche. Sigue habiendo algún que otro escape, pero son producidos por la falta de experiencia a la hora de controlar el tercer estadío Zen en el que entra el peque de vez en cuando y que hace que se olvide de todo aquello que tiene a su alrededor.
Y podemos respirar tranquilos, porque la técnica de «vamos a regar el árbol» funciona a la perfección y no tenemos que salir pitando a buscar un servicio cada vez que suena el «me hago piiiiiiiiiis». 

Como contrapartida hemos desarrollado la técnica de dar por saco con el pis, hasta límites de maestro Shaolin . Y así nos hacemos pis a los 5 minutos de entrar en el coche, cuando el carro de la compra está casi lleno, cuando vas con el tiempo justo, a las cuatro de la madrugada y todo eso.

Un broncas que se ríe a carcajada limpia

Así es el pequeñoJ, el prototipo de hermano menor, picajoso hasta más no poder, liante como el que más, movido como si le hubieran metido un supositorio de capsicina, capaz de descojonarse hasta de su propia sombra y siempre dispuesto para la juerga. Con todo estas cualidades sigue teniendo todas las papeletas para ser un verdadero dolor de cabeza en el futuro.

No obstante, sigue conservando esa capacidad de hacerte bajar a los infiernos para un par de segundos más tarde devolverte al paraíso con un simple cambio en su mirada, mimoso como un gato persa, sabe muy bien qué funciona y qué no con cada uno de nosotros. 

Y a pesar de lo mucho que hace rabiar a su hermano, tengo muy claro que es con diferencia a quien más quiere de todos lo que le rodean, es su modelo y su igual, su compañero de juegos, su capitán, su montura. Todo lo que haga su hermano está bien hecho y punto, (salvo que toque picarle claro, ahí la cosa cambia) Si su hermano pide hamburguesa para cenar, el quiere hamburguesa, si a su hermano no le gusta el postre a él tampoco (el hecho de que lleve devorado medio plato no es impedimento para que de repente nos deje de gustar) y más vale que no riñas a su hermano delante de él, porque vas a desatar al pitbull.

pequeñoM la sensibilidad hecha un rizo


Siempre ha sido un niño de los mal llamados «de lágrima fácil», pero a medida que vamos creciendo esto se va acentuando, hasta el punto en que este último mes parezca que tenga a la Magdalena en casa. Si le riñes, llora, si algo no le sale, llora, si su hermano le toca, llora, si le dices cómo debe hacer las cosas, llora, si le dices que no, llora y yo ya no se como gestionar eso. Me desespera, sobre todo cuando empieza con eso de «mira lo que has hecho. Me has hecho llorar».

Y si a todo lo anterior, le añadimos su archifamosa nacionalidad sueca, podemos decir que nos pasamos el día viajando entre valles de lágrimas y los mundos de yupi y 15 galaxias más allá.

Pero la misma sensibilidad que le hace llorar a la mínima, también le hace fijarse en todo lo que le rodea y querer ir mucho más allá, saber cómo funciona todo, que hay detrás de las cosas, cómo funciona nuestro cuerpo (que es en lo que andamos ultimamente y ya se conoce la serie de erase una vez el cuerpo humano de memoria). Cualquier conversación que se realice cerca de él queda grabada automáticamente para poder ser examinada en un mejor momento. Y así te puede sorprender tres semanas más tarde con una pregunta acerca de algo que dijiste ayer. Teniendo en cuenta que para él conceptos como «ayer» y «esta mañana» siguen siendo las únicas medidas de tiempo universales y sirven para expresar pasado, presente y futuro en cualquier dimensión (ayer abarca desde -24h hasta varios meses). A veces creo que estoy viviendo con el guionista de Fringe. 
Y ya cuando tiene claro que hay algo que pasó hace mucho tiempo usa la medida de «cuando era de dos años».

Un ejemplo claro sería: 
– «¿A que cuando era de dos años había dinosaurios que comían hierba y otros que se comían a los dinosaurios más pequeños?» 
– Si hijo, si. Y cuando eras de uno surgió el Big Bang.

En definitiva podemos decir que seguimos adaptándonos, que hay días mejores y otros que no lo son tanto. Por mi parte diré que sigue siendo muy complicado controlar los gritos y calmarme, a veces se consigue y otras no tanto. Y cuanto más me cabreo más me ofusco conmigo mismo por no ser capaz de salir de ese círculo, de no poder ver las cosas desde otra perspectiva.

Seguimos aprendiendo

Sígueme
Sigue leyendo ->

Stand by

Llevo mucho tiempo con ganas de escribir, es mas, hace un par de semanas, escribí un post bastante largo, muy ocurrente, con mis bromas y todo, pero al releerlo, me di cuenta de que estaba completamente vacío, no contaba nada, hablar por hablar, como algunos políticos vaya, lo guarde en la nevera, en el congelador mejor dicho.
Y esto me lleva a una reflexión, realmente no tengo nada que contar, la vida son cuestas arriba y cuestas abajo, una especie de gráfico de la cotización en Bolsa, pero a veces, como ahora, es una raya recta, como las que aparecen en los monitores en las pelis, cuando quieren que entendamos que el individuo en cuestión la ha palmado, y no es que la hallamos palmado, ¡lagarto, lagarto! es que estamos en un stand by un tanto monótono y aburrido, como ese hueco que hay en las pelis entre la primera parte y la segunda, que empieza diciendo » dos años mas tarde…», y no sabes que ha pasado en ese tiempo… tanto es así, que me plantee seriamente cerrar el blog, escribir un post de despedida, y bye bye, pero luego entendí esto de que, el gráfico nunca se mantiene igual, y que en cualquier momento empezara a bajar, o a, esperemos, subir.

Mi bloggerlife está en stand by también, pero no ha muerto, en cuanto disponga de algo de tiempo, me gustaría volver, no solo a escribir, sino también a leer blogs, detrás de cada blog hay una persona, y me intriga saber que os va pasando por vuestras vidas.
Así que, como dijo Terminator, «volveré…»

Sigue leyendo ->

Stand by

Llevo mucho tiempo con ganas de escribir, es mas, hace un par de semanas, escribí un post bastante largo, muy ocurrente, con mis bromas y todo, pero al releerlo, me di cuenta de que estaba completamente vacío, no contaba nada, hablar por hablar, como algunos políticos vaya, lo guarde en la nevera, en el congelador mejor dicho.
Y esto me lleva a una reflexión, realmente no tengo nada que contar, la vida son cuestas arriba y cuestas abajo, una especie de gráfico de la cotización en Bolsa, pero a veces, como ahora, es una raya recta, como las que aparecen en los monitores en las pelis, cuando quieren que entendamos que el individuo en cuestión la ha palmado, y no es que la hallamos palmado, ¡lagarto, lagarto! es que estamos en un stand by un tanto monótono y aburrido, como ese hueco que hay en las pelis entre la primera parte y la segunda, que empieza diciendo » dos años mas tarde…», y no sabes que ha pasado en ese tiempo… tanto es así, que me plantee seriamente cerrar el blog, escribir un post de despedida, y bye bye, pero luego entendí esto de que, el gráfico nunca se mantiene igual, y que en cualquier momento empezara a bajar, o a, esperemos, subir.

Mi bloggerlife está en stand by también, pero no ha muerto, en cuanto disponga de algo de tiempo, me gustaría volver, no solo a escribir, sino también a leer blogs, detrás de cada blog hay una persona, y me intriga saber que os va pasando por vuestras vidas.
Así que, como dijo Terminator, «volveré…»

Sigue leyendo ->

2 rayitas

| | 

2 rayitas, ese es el comienzo de la aventura, porque en cualquier blog, todos comienzan con un hola mundo, pero en este el primer post deben ser 2 rayitas, así de simple y así de complejo, porque en la inmensidad de esa segunda rayita se esconde una maravilla.

Aparece y te cambia la vida, y eso que aún era eso, dos rayas en un aparatito.

Esas dos rayitas te hacen llorar de

Sigue leyendo ->

2 rayitas

| | 

2 rayitas, ese es el comienzo de la aventura, porque en cualquier blog, todos comienzan con un hola mundo, pero en este el primer post deben ser 2 rayitas, así de simple y así de complejo, porque en la inmensidad de esa segunda rayita se esconde una maravilla.

Aparece y te cambia la vida, y eso que aún era eso, dos rayas en un aparatito.

Esas dos rayitas te hacen llorar de

Sigue leyendo ->

Ciencia para chicos, editada por chicos

Descubrí a través de Laboratorio de Neurociencia Integrativa la web Frontiers for Young Minds. Una web muy simpática e interesante donde podemos encontrar artículos de ciencia, como dice el título, editados por chicos y para chicos. La web propone un sistema de publicación de artículos científicos que serán revisados por un adulto mentor, y un […]

Sigue leyendo ->

El papel

Gentes que entienden de ello me aseguran que las redes sociales ganan terreno día a día y que sus usuarios abandonan en masa los medios de comunicación tradicionales: la radio y hasta la televisión y, sobre todo, la prensa escrita. Dicen que la celeridad de Twitter y otras redes es irresistible y que las noticias se anuncian en décimas de segundos al mundo entero. Y es verdad, veo que la estupidez y la mentira nos llega ahora a una velocidad inimaginable para quienes, como yo, preferimos la falsedad y la tontería reposada de los viejos diarios de siempre. En el papel sabemos leer entre líneas y creemos entender quién engaña a quién y para qué; entre las breves líneas de Twitter uno sospecha que jamás hay nada escrito. O sea, que todo ha cambiado. Y que todo es lo de siempre, pero ya ni el papel nos queda. A ver quién se limpia el culo con un iPad.

Sigue leyendo ->

El papel

Gentes que entienden de ello me aseguran que las redes sociales ganan terreno día a día y que sus usuarios abandonan en masa los medios de comunicación tradicionales: la radio y hasta la televisión y, sobre todo, la prensa escrita. Dicen que la celeridad de Twitter y otras redes es irresistible y que las noticias se anuncian en décimas de segundos al mundo entero. Y es verdad, veo que la estupidez y la mentira nos llega ahora a una velocidad inimaginable para quienes, como yo, preferimos la falsedad y la tontería reposada de los viejos diarios de siempre. En el papel sabemos leer entre líneas y creemos entender quién engaña a quién y para qué; entre las breves líneas de Twitter uno sospecha que jamás hay nada escrito. O sea, que todo ha cambiado. Y que todo es lo de siempre, pero ya ni el papel nos queda. A ver quién se limpia el culo con un iPad.

Sigue leyendo ->

Sillas de pensar… para nosotros…

por Olga Carmona

«… Papá…Si tú te enfadas cada vez que hago algo mal, entonces solo aprenderé cosas de agredir…»  Nicolás (6 años) 


A la hora de valorar que hacer frente a un “mal comportamiento” de un niño o niña,  invito a una primera reflexión sobre si lo ocurrido es un mal comportamiento y para quien, y después planteo no quedarnos solo en cómo intervenir para enseñarles la forma adecuada de resolver un conflicto, sino ir más allá y tratar de entender porqué se provocó y qué está detrás de un mal comportamiento.


Y digo esto porque detrás de algunas “malas” conductas lo que hay es simplemente una falta de herramientas y/o de información que hubieran permitido al niño o niña actuar de otra manera.


Otras veces, las “malas” conductas encierran emociones dolorosas a situaciones para las que no tienen otra forma de gestionar ni de expresar, ni siquiera de identificar.


Por eso, como padres, como educadores, tenemos que trabajar en las dos direcciones paralelamente: la intervención y la reflexión. Y dado que esta sobradamente demostrado que el castigo no sirve para crear aprendizajes a largo plazo, no cambia las causas que provocan la conducta inapropiada y conduce a emociones negativas hacia quien lo impone, tenemos que  habilitar otras maneras de enseñar a nuestros hijos a manejarse de formas más constructivas, tanto para ellos como para los demás. Esto exige, desde luego el empleo de una gran dosis de inteligencia emocional por nuestra parte y también de creatividad. Dejarnos llevar por el impulso, por el castigo cargado de impotencia, por la falta de alternativas, por la agresividad que algunas situaciones nos generan, es lo fácil, lo automático, para lo que estamos programados. Pero eso no es educar. Eso es reaccionar.


Educar requiere un máximo de paciencia, empatía y de creatividad. Requiere una intención voluntaria de desprogramarnos, requiere muchas veces una “silla de pensar” para nosotros. Un lugar donde, a solas y apartado de nuestro hijo, seamos capaces de calmarnos y recuperar un lugar de serenidad. A partir de ahí, podremos “accionar” en lugar de “reaccionar”, podremos conectarnos con la situación objetiva y valorar con suficiente distancia lo que de verdad ocurrió y hasta que punto era tan importante. Podremos ejercer como educadores, no como parte del problema.


Así pues, este sería el primer paso ante un conflicto que nos provoca emociones intensas de ira o agresividad: no actuar. Si se trata de una agresión entre hermanos, poner a salvo al agredido y tratar de hacer lo posible por no formar parte del círculo vicioso y añadir más agresividad y tensión. Parar. Buscar nuestra silla de pensar. Conectarnos con un lugar en calma porque es indispensable recuperar el equilibrio, por precario que sea, para poder ofrecérselo a ellos.


El siguiente paso sería neutralizar también la intensa emoción que tiene tanto el agresor, como el agredido, priorizando a éste último. Si se trata de otro tipo de mal comportamiento, también suele desatar emociones muy fuertes en ellos y cuando su cerebro está inundado de cortisol (hormona del estrés) no escucha, no ve, no aprende. Está literalmente borracho de negatividad y nuestras palabras serán incluso contraproducentes, aún en el caso de que remotamente sean escuchadas.


El abrazo, si se deja, el acompañamiento tranquilo y silencioso, las palabras calmadas que no buscan culpables ni respuestas, hacer un chiste, unas cosquillas,  ayudan a ir recuperando un estado donde sí será posible entenderse y tal vez, aprender algo.


Una vez sea posible iniciar un diálogo hay formas tóxicas, muy dañinas, a evitar:

Las etiquetas: eres… (eres agresivo, eres lento).
Los absolutismos: siempre, nunca.
Las generalizaciones: No hay una sola vez que te diga que hagas los deberes y te pongas a la primera.
Las ironías.
Las metáforas, que a determinadas edades no entienden y te alejan de ser escuchado.
Las frases hechas.


Una comunicación efectiva, tras un conflicto requiere pautas muy sencillas pero que sólo fluyen desde un estado de ánimo sereno y con ganas de construir:

Pedir al niño que describa lo ocurrido y escuchar sin corregirle, sin juzgarle.

Si no es capaz de hacerlo (por edad, por falta de recursos lingüisticos, etc), ayudarle a la reconstrucción de lo que ocurrió, tratando de bajar el lenguaje de forma que nos podamos entender.

Que intente identificar la emoción que le llevó a hacerlo y la que sintió después de haberlo hecho: “me enfadé tanto con mi hermano que le di con la caja”. 

Reconocer la emoción y darle importancia. No queremos inhibir el sentir, sino enseñarles a  identificar sus emociones para poderlas manejar. No está mal sentir cualquier cosa, es parte de la naturaleza humana y juzgarlas como malas o buenas invita a la culpa e impide su canalización.

Explicarle cómo nos hemos sentido nosotros frente a su mal comportamiento, con palabras certeras, llamando a cada emoción por su nombre: frustrado, enfadado, triste… Desde el “yo  me he sentido”, jamás  utilizaremos “me has hecho sentir”. Debes hacerte cargo de tus emociones, son tuyas, no suyas. Bastante tiene él o ella con empezar a conocerlas como para además ocuparse de las tuyas. Se supone que eres el que tiene la mayor cantidad de información. 

Ayudarle a empatizar, buscando ejemplos muy cercanos, cotidianos, que le conecten con una emoción parecida. Sirven las pelis, los dibujos animados, los cuentos, algún incidente en clase… Recordemos que para educar necesitamos altas dosis de creatividad.

Algunas veces, tal vez más de las que nos damos cuenta, el conflicto se puede evitar. Ello implica estar presente, estar atento, y ser capaz de adelantarse a la situación. Y aquí quiero hacer una aclaración : la profecía autocumplida.


Prevenir un conflicto no significa decir “cuidado porque se te va a caer el agua”, porque hay muchas más posibilidades de que se caiga después de haberlo advertido. La profecía autocumplida es  una predicción que, una vez hecha, es en sí misma la causa de que se haga realidad.

La prevención en este caso es evitar la situación que hará más que posible que “se le caiga el agua”: acción, no reacción.

Otra cosa a tener en cuenta cuando educamos es saber que nuestro cerebro tiene serias dificultades para procesar el “No”. Por tanto, tengo muchas más opciones de ser escuchado cuando enuncio frases en positivo que en negativo: “no debes pegar a tu hermano” es mucho menos eficaz que “me gustaría que cuidaras a tu hermano un poco más”… hay mil ejemplos.

Tener conciencia de que costará una y mil veces aprenderlo, de que parecerá que no ha servido de nada. Estamos sembrando, compañeros, estamos sembrando. Grandes dosis de paciencia, dije al principio. También para no caer en la inmediatez de algo tan difícil.

Reconoceremos cada éxito, pero también ( o más) cada intento. Y, si es posible, haremos una “marcha atrás” donde le damos al botón que vuelve a empezar para darles la oportunidad de hacerlo de otra manera, con la nueva, con la recién aprendida.

El sentido el humor es un maravilloso comodín a la hora de educar. La risa desbloquea y sustituye el cortisol por endorfinas, creando un cerebro abonado para el aprendizaje, el que perdura. Solo aprendemos aquello que está asociado a una emoción. Entonces, tratemos de hacerlo en positivo.

Confía, confía, confía… si mandas el mensaje emocional de que no crees que será capaz de cambiar, de hacerlo mejor, no lo hará. Y lo peor, esa sensación le acompañará el resto de su vida. Te necesita para construirse. CONFIA, con el corazón, con honestidad. Tiene todo el potencial para hacerlo, sólo necesita tu mirada positiva.

Recuerda lo hablado o vuelve a hablarlo las veces que hagan falta, cada vez que lo necesite. Sin caer en el hastío, en el “ya te lo he dicho” o peor, en el “te lo dije”.

Es esencial también tomar conciencia de que esto es una carrera de fondo, de que somos padres y educadores 24 horas al dia 7 días a la semana y que nadie hemos aprendido en un solo ensayo. Que es más fácil enseñar a leer o a hacer un logaritmo que enseñar comunicación emocional, estrategias de aprendizaje vital, recursos para preservar y construir su autoestima, poner los andamiajes del adulto feliz y pleno que pretendemos sea algún día.

Por eso, como madre, como educadora, como psicóloga y como persona deshecho el castigo, porque aunque pueda crear la ilusión óptica y superficial que hemos conseguido cambiar una conducta, puedo certificar que lo que habremos cambiado será una sóla manifestación de una falta de recursos emocionales y de la natural falta de información sobre como vivir, que tiene cualquier niño. No debemos nunca olvidar que están aprendiendo cómo vivir y construyéndo como ser, sin apenas recursos, inundados de estímulos y de emociones intensas.

Afirmo, sin embargo, que el castigo cambiará algo. 
Y lo cambiará de forma irreversible: la calidad del vínculo hacia sí mismo y hacia nosotros. 

Pero no le enseñará lo que verdaderamente necesita para que cambie y tenga una conducta más constructiva.


El castigo le enseñará a ser como los demas esperan que sea

Le educación emocional le enseñara a ser quien quiera ser, en libertad, sin depender de los otros en su trayecto personal y vital.

Sigue leyendo ->